Rocky Rodríguez, de Angel City FC: para ganar títulos, en un equipo debe haber confianza

En un equipo que apenas fue fundado hace cuatro años y debutó en 2022, la experiencia de una jugadora como Rocky Rodríguez vale oro.
Antes de llegar a Los Ángeles, la costarricense lo había ganado todo en el fútbol profesional de Estados Unidos. Rodríguez jugó en Portland de 2020 a 2023, el club más ganador de la NWSL, con el que conquistó un título de liga, un trofeo de mejor equipo de la temporada regular y los torneos Fall Series y Challenge Cup en 2020 y 2021, respectivamente.
Cuando llegó la costarricense al equipo, se le preguntó a la entrenadora qué era lo que separaba a la tica de otras jugadoras. Su respuesta fue simple.
“Sabe lo que es ganar”, dijo Becki Tweed al portal oficial del Angel City.
En las Thorns, la nacida en San José, Costa Rica, jugó 72 partidos y fue elemental en aquel campeonato de 2022. Antes de eso había jugado en el Sky Blue FC y el Perth Glory de Australia, país donde se convirtió en la primera jugadora centroamericana en jugar en la liga profesional.
“Cada vez que alguien ha ganado la NWSL, siempre le tienes que preguntar muchas cosas”, expresó la entrenadora.
Sin embargo, la temporada para el Angel City y Rodríguez no ha sido miel sobre hojuelas. De hecho, si el torneo terminara hoy, estarían eliminadas. El Angel City está en décimo puesto, a dos puestos de playoffs, a uno del noveno puesto Racing Louisville y a cuatro de Bay FC, el octavo y último lugar rumbo a la postemporada.
El lunes, Rodríguez enfrentará a su exequipo, las Portland Thorns, en el BMO Stadium (7:30 p.m., CBS Sports Network), en lo que será el primero de los últimos seis partidos que le quedan al Angel City, tres de ellos como local.
Portland está en sexto lugar en la liga y también busca escalar puestos de cara a la postemporada.
“Nos quedan seis partidos, hay cierta tensión, sabemos que tenemos que ganar”, expresó Rodríguez.
“Tenemos que centrarnos en un partido cada vez. Ahora el objetivo de cada partido son los tres puntos. Sabemos que estamos decepcionadas por no haber sumado ningún punto en los dos últimos partidos; en partidos en los que deberíamos haber sumado puntos. Nos presionamos un poco, y sabemos que ahora hay que ganar todos los partidos”, declaró Tweed sobre el juego del lunes.
En lo que se refiere a los secretos de un equipo ganador, Rodríguez, de 30 años, comentó que se necesita algo especial: la confianza.
“La cohesión de un equipo es muy importante, la química, las asociaciones. Pero en un equipo tiene que haber una cultura donde haya confianza, tanto en las jugadoras y entrenadoras antes de todo eso”, explicó Rodríguez.
Tras tener una carrera profesional a nivel colegial jugando para Penn State, donde ganó un campeonato nacional, Rodríguez llegó en 2016 a una liga de la NWSL que no se parecía en nada a lo que es ahora. En 2016, el salario mínimo de una jugadora era de $7,200 y el máximo $39,700. En 2024, el salario mínimo es de 37,856 mientras que no existe un tope de salario máximo bajo el nuevo contrato con el sindicato de jugadoras de la NWSL.
“Creo que ha crecido muchísimo la liga. Lo más importante es que las condiciones, las formas de jugadoras, la forma de vida de las jugadoras ha mejorado”, indicó Rodríguez. “En estos últimos años ha tratado de traer a más jugadoras internacionales”.
Al hablar del reciente retiro de Alex Morgan, exjugadora del Wave de San Diego, manifestó que aportó mucho en su legado, pero en especial fue el abogar por las condiciones de otras jugadoras.
“Es una jugadora muy prominente en la industria. Lo más importante es que ella utilizó su plataforma para mejorar nuestras condiciones”, expresó Rodríguez. “Estando en una oposición donde podría influir más, lo hizo, tanto en su selección como en la liga”.